Desnuda de vos




Bajas. Rodeas mi ombligo,
reclamas la lluvia que te nombra,
que me hace fuente tuya.

Sigues.
Deslizas cometas,
me elevas,
lengua-luna al dictado de mis mareas,
ciega luz que me palpa.


Y una boca devora mi alma,
habita en tu vientre,
apéndice fiel de ti,
vacía ya de todo lo que fui
en otro tiempo.
.